El Gobierno nacional continúa negociando con las empresas exportadoras de cereales para congelar el precio del pan, fideos y otros productos a base de harina a valores populares.
Las empresas nucleadas en CIARA se comprometieron a enviar una propuesta alternativa al aumento de dos puntos en las retenciones al aceite y harina de soja: garantizarle a la molinería 3,8 millones de toneladas de trigo a un valor de 25.000 pesos la tonelada y no los actuales 35.000 pesos. La otra alternativa es la creación del fideicomiso estatal fondeado con la suba de los derechos de exportación tal como publicó BAE Negocios.
La cotización del trigo en el Mercado de Chicago llegó a los 410 dólares la tonelada para entregas en mayo. En lo que va de marzo, los productos a base de harinas siguieron su escalada alcista en línea con el contexto global. Pero también con un fuerte componente especulativo Según el relevamiento de la Secretaría de Comercio interior, los productos a base de harinas en supermercados de todo el país registran una suba promedio del 2,8 por ciento, registrada en los primeros 15 días del mes. Pero la harina 000, que es la que se utiliza para los panificados, ya aumentó un 19 por ciento.
¿Quién se queda con la mayor tajada en la suba de los precios internacionales de esta materia prima? La pregunta es clave, ya que la cadena del trigo -producción primaria, exportación y molinería- está fuertemente concentrada en pocos jugadores, según un informe sectorial del Ministerio de Economía. Esta "estructura productiva desigual" explicaría gran parte del actual conflicto por el precio del pan.
Es decir, a mayor concentración, "menos derrame y más ganancias para los exportadores", según el análisis del economista Andrés Asiain, director del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortíz.
De los 37.425 productores que existen de este cereal, el 10% concentra el 53,4% del área sembrada.
Es decir, existe una fuerte concentración en la producción primaria según el análisis sectorial realizado por el Ministerio de Economía al que accedió BAE Negocios. Mientras que sólo 10 empresas concentran el 94,9% de las ventas al exterior. Las principales exportadoras son ADM Agro (18,2%), COFCO (17,6%), Cargill (15,5%), Bunge (12,7%) y Dreyfus (10,8%).
La concentración también ocurre en la molinería: el 4,7% de los molinos, con una producción superior a las 100.000 toneladas, nuclea el 50,4% de la industrialización.
La principal empresa es Molino Cañuelas, con más del 23 por ciento del mercado. La compañía ingresó en una convocatoria de acreedores sobre el cierre del año pasado.
La producción de pastas también se encuentra concentrada, según el trabajo sectorial de la cartera que conduce Martín Guzmán: de un total de 47 empresas, solamente 4 acaparan el 67,4% de la capacidad instalada agregada.
Y solo cinco acumulan el 76,5% de la producción anual. La sociedad Molinos Río de la Plata se queda con el 44,5% de todo este mercado.
El informe arroja otro dato clave: la producción de pan tradicional se encuentra nítidamente atomizada en un universo estimado de entre 15.000 y 20.000 panaderías pymes. Por ende, los formadores de precios se encontrarían en los eslabones más concentrados de la cadena.
El informe también detectó un incremento de la participación del precio del trigo en el valor del pan, al pasar de una relación del 11% en 2018 (dato que es constantemente repetido por los integrantes de la Mesa de Enlace) a un 15% para noviembre del año pasado.
Autor : Sebastián Premici