El Vicepresidente del Senasa, Rodolfo Acerbi, habló en Chacra 360 Continental sobre el nuevo laboratorio inauguró en Santa Fe para las muestras de Influenza Aviar. El mismo será descentralizado y se podrán llevar muestras desde el norte del país.
"Estamos articulando con el Ministerio de Agricultura Santa Fe la posibilidad de descentralizar el diagnóstico de Influenza Aviar para todo lo que es muestras del norte del país", contó Acerbi y señaló: "Recordemos que el primer caso fue en la Puna y tuvo que viajar la muestra del Cóndor Andino de la Puna a Martínez, provincia de Buenos Aires".
De esta manera, Acerbi explicó que "Santa Fe tiene un laboratorio donde veníamos trabajando hace años en conjunto, en brucelosis y tuberculosis, faltaban equipamientos que la provincia lo puso inmediatamente porque lo tenía casi sin uso que era un lector de PCR, faltaba la capacitación y los equipos diagnósticos, los puso Senasa".
Cabe destacar que la Directora de Laboratorio, Ana Nicola junto con la profesional que trabaja en Martínez en PCR, capacitó a dos personas del Senasa y dos de la provincia de Santa Fe.
"Santa Fe y Senasa están en condiciones, a partir del lunes, de recibir muestras sospechosas de la provincia sospechosas de Córdoba, del norte del país", contó Acerbi y explicó: "Necesitamos que haya muestras sospechosas lo que no necesitamos es que haya positivos".
"Que haya muestras sospechosas significa que toda la comunidad rural y la gente que trabaja en los parques nacionales esté atenta porque esta enfermedad no vino un ratito y se fue; entonces cualquier relajamiento en el diagnóstico precoz y la atención temprana, cualquier falla en esa fórmula nos vuelve a costar caro a todos, al sector privado y el sector público", destacó Acerbi.
"Decimos siempre detección rápida y atención precoz porque el virus si está presente y nadie lo ve, empieza a caminar, a caminar, a caminar, y cuando uno quiere acordarse se expandió y ya el trabajo tanto de la provincia, municipio, del Senasa y los mismos productores se hace imposible", destacó Acerbi y explicó que "el virus no perdona, donde entra mata y mata mucho".
"La dinámica de la agricultura hace que estar parado 30 días a cualquier productor le significa, independientemente de perder su capital de trabajo, un cese de actividades importante", sostuvo Acerbi y resaltó: "No solamente del lado sanitario, nos ocupa el sanitario, pero nos preocupa también el social y económico".