El analista internacional, Marcelo Elizondo, habló en Chacra 360 Continental en donde destaca la complejidad y costos de las estrictas políticas ambientales de la Unión Europea, generando protestas entre los productores. Además, se analizan medidas de la nueva Política Agrícola Comunitaria (PAC) y la exigencia ambiental europea, planteando dilemas para Argentina en relación con el acuerdo Mercosur-UE. A pesar de las tensiones, se vislumbra un potencial en la exportación agroalimentaria argentina, a pesar de su posición relativamente débil en el comercio internacional.
"Este es un problema serio porque es de una gran envergadura y complejo porque tiene muchas aristas", sostuvo Elizondo haciendo referencia a las protestas que realizaron los productores europeos.
En este sentido, el analista internacional señaló que "la Unión Europea ha puesto en marcha ambiciosas políticas de amigabilidad con el ambiente lo que supone regulaciones muy rígidas y costos" y agregó que "lo que ocurre con la política estricta y muy regulacionista e intervencionista y que genera costos en relación al ambiente en Europa, vinculado con los productores, es que los productores están viendo que tienen que dedicar más costos que le quitan competitividad o porque tienen que dejar porciones de sus explotaciones sin producir o porque se incrementa el costo del gasoil por políticas ambientalistas o porque la burocracia de Bruselas está avanzando mucho, incluso en algunos países con burocracia nacional aún superior a la de Bruselas, como Francia, y en este contexto los productores europeos están diciendo no puedo competir".
De esta manera Elizondo explicó que las políticas ambientales europeas son costosas y acá está discutiéndose "quién paga por esto". "Los productores están diciendo yo tengo que pagar más costos por esto, no puedo competir y acá hay una discusión que va más allá de Europa", sostuvo el analista y contó que "el mundo está con visiones sobre lo ambiental que son distintos, los que están incrementando regulaciones se hacen menos competitivos en términos de costos y tienen más restricciones para competir".
Por otro lado, el analista internacional habló sobre las medidas que tomó la nueva PAC, (Política Agrícola Comunitaria) que ha decidido dejar de lado la implementación del r 50% de los fitosanitarios. "Europa pretende ser la líder en el mundo en políticas ambientalistas", sostuvo Elizondo y opinó que "las exigencias europeas en este plano están en un nivel de demasiada exigencia".
Además, sostuvo que "hay algún capricho regulacionista y hay una discusión potencial con la Argentina" y agregó que "Argentina es el país con mayor eficiencia ambiental de su producción, pero los criterios de desertificación no son los mismos que los europeos, por lo tanto, la discusión es, ¿tenemos que ser ambientalmente amigables o tenemos que cumplir las regulaciones europeas, que en realidad a veces exigen más allá del resultado?".
Elizondo señaló que "el mundo no va a acompañar esto y van a haber muchos como nosotros en el Mercosur y probablemente otros países, como Canadá, Rusia, que no van a convalidar esto" y explicó que "va a haber una diferencia de competencia en términos de los costos que surgen de quién es más estricto y quién es menos". De aquí surgen varios problemas como: ¿Quién exige más, ¿quién menos?, ¿cómo se certifican las buenas prácticas? "Lo que creo que va a ocurrir en adelante es que esto se va a discutir en el mundo", señaló Elizondo y opinó que "parte de la discusión en el mundo va a ser quién se hace el cargo de los costos de esto que en definitiva es una disputa casi filosófica o ideológica".
El analista internacional habló sobre los aspectos que más consideran los agricultores que los perjudicaría de lograrse el acuerdo Mercosur-UE. En este sentido, Elizondo sostuvo que "hay preocupaciones de los dos lados porque hay productores agrícolas argentinos que temen que acordado potencialmente un mercado común y un libre comercio entre los dos puedan aparecer restricciones no arancelarias del lado europeo que nos empiecen a correr el arco para entrar comercialmente por exigencias y estándares ulteriores" y agregó que "políticamente da la sensación de que los cuatro países del Mercosur tienen una vocación desde el punto de vista de política pública favorable".
En contrapartida, los temores de los productores europeos y que están generando en las protestas impacto en las autoridades, "tiene que ver con cómo competir contra una producción muy eficiente y que en todo caso está comprometida a certificar, pero de otro modo, que va a ser más competitiva que la europea en términos de costos".
Por otro lado, Elizondo opinó que "hay una diagonal para trazar que es que vendemos en el Mercosur buena parte de nuestra producción agropecuaria a mercados asiáticos" y explicó que "Europa podría proveernos a nosotros inversiones para generar ese salto en el valor agregado que tantas veces reclamamos en materia de producción en la cadena agrícola".
Por último, el analista internacional opinó sobre cómo ve el futuro de la exportación agroalimentaria argentina. "Con un gran potencial", sostuvo enfáticamente y agregó que "la Argentina, siendo un jugador débil en el comercio internacional, apenas generamos el 0,3% de todas las exportaciones mundiales, aun así, tenemos en la agroproducción el sector más competitivo".