Representantes de entes portuarios, puertos privados, gremios y especialistas el sector del transporte fluvial se encontraron ayer en la Bolsa de Comercio de Rosario para debatir las problemáticas y perspectivas del sector en el marco del IX Encuentro Argentino de Transporte Fluvial que cada año organiza el Instituto de Desarrollo Regional Rosario (IDR).
"Para que la región sea competitiva precisamos nuevos marcos regulatorios porque la matriz del transporte en Argentina está distorsionada, esa es la agenda que debemos discutir y debatir con los que toman las decisiones", señaló durante la apertura del congreso Juan Carlos Venesia, el presidente del IDR.
Ante un auditorio repleto, y con la presencia de los candidatos a gobernador del socialismo, Miguel Lifschtiz, y del PRO Miguel del Sel, los panelistas repasaron los desafíos en infraestructura que presenta Argentina y la región en particular.
Además de Venesia, participaron de la apertura del encuentro la intendenta Mónica Fein, el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de la provincia Antonio Ciancio, y el presidente de la Bolsa de Comercio Raúl Meroi.
En ese marco, el experto de la Cepal (Comisión Económica para América Latina) Ricardo Sánchez resaltó la "coyuntura delicada" que atraviesa el sector portuario en América latina en general y en Argentina en particular, afectados por la merma de los flujos de comercio internacional generados tras la crisis de 2008.
A eso se le suma una creciente concentración de las grandes empresas de transporte marítimo, y una mayor cantidad de actores privados que se fueron sumando al universo de los puertos latinoamericanos. "Una mayor concentración de la demanda permite que sean los clientes los que tienen más margen para negociar los precios", alertó.
También señaló la "brecha en infraestructura" como el principal obstáculo para el desarrollo que tienen en este momento los países de la región, que deberían multiplicar al menos por dos su inversión en ese rubro para ser competitivos a nivel global.
Proyecto regional. Rolando Terrazas e Isaac Maidana, de la Corporación Andina de Fomento (CAF), anunciaron a su turno que en el segundo semestre de este año se presentará el proyecto regional para el desarrollo de las hidrovías sudamericanas. La iniciativa contempla una estrategia integral de acciones tendientes no sólo a trabajar en la navegabilidad de las vías nevagables del interior del subcontinente sino a invertir en infraestructura, fortalecimiento institucional, alianzas regionales, desarrollo social, sistemas de información y conocimiento.
La vinculación de la CAF con los proyectos vinculados a la hidrovía lleva más de 20 años pero a fines de noviembre pasado, durante un taller realizado en Asunción del Paraguay con participación de especialistas de los 19 países socios de la entidad decidieron acelerar estas iniciativas, que tienen la hidrovía Paraná-Paraguay entre sus prioridades.
Maidana señaló que, en este caso, se avanzó mucho en los trabajados de acondicionamiento desde la capital paraguaya hacia el sur. De allí hacia el norte, estimó que "con una inversión de 80 ó 90 millones de dólares se pueden mejorar 2 mil kilómetros de vía navegable".
El organismo multilateral, que nació como banca de desarrollo de los países andinos pero luego se amplió al resto de América latina, pretende avanzar en el desarrollo de este plan porque, señaló el funcionario, "hay buen ambiente político y mucha carga" que empuja esa posibilidad.
El funcionario de CAF aseguró que el 70 por ciento del territorio sudamericano está atravesado por hidrovías, que constituyen un medio de integración, comunicación y desarrollo de los países que integran sus cuentas.
Sin embargo, también advirtió que la potencialidad de esos espacios económicos suele coincidir con bajos niveles de desarrollo social. De allí que destacó la necesidad de avanzar en el tema con una visión "integral" que de cuenta de los factores económicos, políticos, sociales y ambientales.
Astilleros nacionales en crisis
Miguel Alvarez, secretario ejecutivo de la Cámara Santafesina de la Industria Naval (Casin) y vicepresidente segundo de la Federación de la Industria Naval Argentina (Fina), expresó su preocupación por la pérdida de trabajo en el sector a raíz de la falta de competitividad de los astilleros nacionales frente a los vecinos Brasil, Paraguay y Uruguay. Para dar muestra de la situación señaló que mientras hace muy poco tiempo atrás las empresas del sector santafesinas empleaban a 700 trabajadores, hoy sólo mantienen 300 puestos de trabajo.
