La presidente Cristina Kirchner nombró a Cristian Alexis Girard, de estrecha relación con el ministro de Economía, Axel Kicillof, como titular de la Comisión Nacional de Valores (CNV). Con sólo 32 años, tendrá a su cargo el manejo del mercado financiero, un puesto que dejó Alejandro Vanoli para pasar a presidir el Banco Central luego de que Juan Carlos Fábrega renunciara al cargo, tras las acusaciones de Cristina Kirchner, en un acto en Casa de Gobierno.
La decisión se conoció este viernes, a través del decreto 1737, publicado en el Boletín Oficial, que lleva las firmas de la Presidente; el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; y el titular del Palacio de Hacienda. Allí, se destaca que el joven licenciado "reúne los requisitos de idoneidad y experiencia necesarios para desempeñar dicho cargo".
El miércoles, apenas se conoció el nombramiento de Vanoli, sonaban con fuerza como candidatas a conducir la CNV dos gerentas de esa entidad (Karina Bermúdez y Soledad Castro), pero finalmente la mandataria se inclinó por un hombre del riñón de Kicillof.
Desde 2012 y hasta ayer, se desempeñaba -bajo la órbita del Ministerio de Economía- como coordinador de los directores estatales que hay en las 43 empresas en las que la Anses tiene acciones. Es un delfín de Kicillof, y economista destacado del Centro de Estudios para el Desarrollo Argentino (CENDA), creado por el titular de Hacienda en 2004.
Además, desde fines de abril de este año, tras la salida de Repsol de YPF, la asamblea de la petrolera lo nombró como director suplente por la Clase D a Girard, entre otros.
El año pasado, en tanto, quedó envuelto en una polémica cuando el Senado, con el apoyo del titular del bloque kirchnerista, Miguel Ángel Pichetto, aprobó un pedido al Poder Ejecutivo para que informe sobre la orden de Girard para evitar que los directores representantes del Estado en las empresas tributen el Impuesto a las Ganancias.
En el texto, se le exigía al Ejecutivo que detalle las razones que llevaron a Girard, como director nacional de Empresas con Participación del Estado, a reclamar la no retención del tributo por parte de las empresas sobre los honorarios que perciben los representantes del Estado en los directorios. En una conferencia de prensa, días después, Kicillof negó que el economista, inscripto como monotributista en la categoría B, manifestara su intención de no pagar Ganancias.
