China publicó el jueves un nuevo proyecto de ley sobre la gestión de sus reservas de cereales para incluir la supervisión de las existencias en las regiones y provincias mientras busca reforzar su seguridad alimentaria.
Las reglas anteriores que regían las reservas de granos solo se aplicaban a las reservas de su estado central, pero este año Beijing ha aumentado su enfoque en los riesgos para el suministro de alimentos.
La ley fue redactada como "nuevas situaciones y preguntas sobre la administración de la seguridad de las reservas de granos, lo que plantea serios desafíos a la seguridad de las reservas de granos de China", dijo la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma en un comunicado en su sitio web.
China dijo en mayo que redactaría y llevaría a cabo planes a corto y largo plazo para garantizar la seguridad alimentaria en medio de la pandemia mundial de coronavirus.
La pandemia ha interrumpido las cadenas de suministro agrícolas en todo el mundo, amenazando con desencadenar una posible crisis alimentaria y mientras el virus continúa propagándose por todo el mundo.
Los gobiernos locales deberían acumular reservas de granos y aceites procesados de una escala adecuada en áreas centrales de ciudades y regiones medianas y grandes con mercados que son propensos a la volatilidad, dijo el planificador estatal.
"La necesidad del estado de asegurar la producción de granos y su capacidad para controlar los suministros domésticos se ha vuelto más urgente", dijo Meng Jinhui, analista senior de Shengda Futures.
La nueva ley estipula cómo se deben establecer los volúmenes de reserva y los productos a incluir, así como cuándo se pueden liberar los granos.
Las reservas solo deben usarse en casos de escasez evidente de granos, movimientos significativos de precios, desastres naturales importantes u otras emergencias.
El documento también alienta a los residentes urbanos y rurales a almacenar granos de manera razonable.
