En el sector norte del área de estudio, puntualmente en el departamento General Obligado, comenzó el proceso de cosecha del cultivo maíz temprano. Los primeros datos mostraron bajos rendimientos bajos (4.500 kilos por hectárea - 5.500 kilos por hectárea) y con un alto porcentaje de humedad de grano, dichas cifras serían solo informativas.
Los maizales con destino comercial, no variaron sus estados, un 75 % de los cultivares se encontraron de buenos a muy buenos, algunos lotes excelentes, sin inconvenientes para su normal desarrollo, regular un 15 % y un 10 % pasó a malo, con marcados síntomas de estrés termo-hídrico y mortandad de plantas, sin recuperación.
Según el informe de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, los dos últimos casos de lotes regulares y malos, se evidenciaron en mayor proporción, en suelos de aptitudes agrícolas no ideales o con ciertas limitantes.
En el área de influencia de las cuencas lecheras del centro - norte santafesino, el proceso de picado - embolsado, con destino al autoconsumo, se dio por finalizado con 20.500 hectáreas trabajadas (unas 2.900 menos que el año pasado), obteniéndose buenos resultados, en cuanto a calidad y a cantidad con un rinde promedio entre 11 a 13 mts/bolsa/ha. Un porcentaje de los mismos, ante los eventos climáticos y las nuevas condiciones ambientales avanzaron en las etapas fenológicas, pasando su destino a grano comercial.
Con respecto al maíz tardío presentó un 93 % en estado bueno a muy bueno con lotes excelentes, un 3 % regular y un 1 % malo. Los diferentes escenarios climáticos acontecidos, favorecieron el desarrollo y el avance de los estados fenológicos, expresando todo su potencial genético. Los maizales no evidenciaron inconvenientes sanitarios por plagas o enfermedades.