Economia

Se disparan los precios y la harina y el aceite ya están por las nubes

En Rosario estiman que se registrarán más aumentos en los próximos días. Y si bien aseguran que no habrá desabastecimiento, ya hay productos que se racionan

Hace 15 días el kilo de harina 000 costaba 49 pesos y hoy se encuentra en 75, es decir que sumó un aumento del 53 por ciento. Con el aceite sucedió otro tanto. Si bien el precio varía según las marcas, hace dos semanas se conseguía una botella de aceite de girasol de 900 mililitros por 220 pesos y hoy, el mismo producto cuesta entre 299 y 349 pesos. Esta estampida de precios  preocupa a los comerciantes rosarinos, que ya empezaron a racionar la venta de algunos artículos, en parte porque no siempre reciben toda la mercadería que solicitan a los proveedores.

El tema no termina ahí, los comerciantes prevén que en los próximos días los precios seguirán subiendo, calculan que un 10 por ciento, y exigen al gobierno nacional que intervenga para regular y frenar los incrementos que impactan directamente sobre el bolsillo de los consumidores.

Ni el presidente de la Cámara de Supermercados  y Autoservicios de Rosario y la Región, Sergio López, ni el titular del Centro Unión de Almaceneros de Rosario, Juan Milito, pudieron determinar cuál fue el porcentaje de aumento de los precios de estos productos, porque varían mucho y en poco tiempo.

Pero lo que se ve en las góndolas es que hace tiempo que la venta de aceite está restringida. En almacenes más pequeños se permite comprar una sola botella por persona, mientras que en las grandes cadenas de supermercados se autoriza un máximo de 3 unidades "sin excepción", aclaran los carteles pegados junto a los productos.

López explicó que esto se debe, en parte, a que "hace tiempo hay problemas con la entrega de aceites" a los supermercados.

Por otra parte, tanto desde los supermercados como desde los almacenes señalaron que el incremento de precios de estos dos productos básicos como la harina y el aceite impactará directamente en los costos de sus derivados y productos elaborados.

"El aumento de la harina recaerá directamente sobre el pan, los panificados y los diferentes tipos de galletitas. Por ejemplo, el pan envasado ya registró un incremento de entre un 15 y un 30 por ciento en el último mes, y las galletitas 9 de Oro, que es un producto de consumo básico, ya tienen un incremento del 20 por ciento", indicó Milito.

Tanto el representante de los almacenes como el de los supermercados aseguraron que "no habrá desabastecimiento" y subrayaron que sería un "error" salir a comprar en forma desmedida.

Recesión

El aumento de precios, que todavía no se vio en su totalidad, impactó directamente en el bolsillo. De hecho los almaceneros notaron cómo en el último mes bajó el consumo. "Esto afecta sobre todo a la clase media y media baja, que compra menos, o productos de menor calidad. Se nota que el salario no alcanza", expresó Milito.

Tanto Milito como López reconocieron que la situación mundial y la guerra en Ucrania podrían tener alguna consecuencia en el mercado argentino y en el aumento de los precios, pero también subrayaron que "en un país productor de harina y de aceite no deberían haberse disparado tanto los costos" y apuntaron a una "distorsión de precios que no tiene una respuesta lógica".

"Es urgente que el gobierno nacional tome medidas para estabilizar los precios", declaró Milito y manifestó la necesidad de que "se diferencien los precios nacionales de los internacionales" para que no sigan perjudicando al consumidor final.

Mientras tanto, los comerciantes restringen la compra de aceite para "que todos los clientes puedan comprar" y piden solidaridad, pero los precios siguen aumentando sin tregua.

Ahora el impacto se vio reflejado sobre todo en las botellas de aceite y en los paquetes de harina, pero en los próximos días cambiarán los precios de la mayoría de las góndolas.

Los alimentos y las bebidas, los productos básicos que más aumentaron

Según el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso) el Índice de Precios de Supermercados (IPS-Ceso) mostró una variación del 2,9% en la última semana de marzo, con respecto a la anterior, y de 3,6% respecto a cuatro semanas atrás.

La variación semanal en la segunda semana de marzo (2,9%) superó ampliamente el valor de la semana anterior (1,1%). "Este aumento semanal es el más alto desde octubre del 2020", destacan desde el Ceso.

Los economistas del centro destacaron que los derivados del trigo se catapultaron junto con los precios internacionales: fideos secos (9,2%) en la última semana y (7,4%) mensual. Las harinas, cuando se consiguen, aumentaron un 5,6% semanal y un 7% mensual. Las dos primeras semanas de marzo dejan un piso alto para un mes clave por la incidencia que tiene en las paritarias que empiezan a definirse.

A lo largo del mes, los rubros con mayor variación fueron los alimentos frescos (5,3%), alimentos secos (5,2%) y bebidas (3,4%).

A su vez, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) indicó que la inflación de febrero fue de 4,7%. Con esta disparada, el Indice de Precios al Consumidor acumula 8,6% en el primer bimestre del año y es la más alta desde marzo del año pasado. Los alimentos y las bebidas no alcohólicas fueron los que más aumentaron, con el 7,5%.