Arabia Saudita deja a las aves de corral brasileñas en alerta
El Ministerio de Agricultura considera que los árabes están creando una narrativa para elevar el tono e imponer restricciones más amplias y estrictas sobre el producto brasileño.
La decisión de Arabia Saudita de suspender las compras de pollo de dos mataderos de Brasil puede ser solo la punta del iceberg de un importante problema comercial. El Ministerio de Agricultura tiene razones para creer que los árabes están creando una narrativa para elevar el tono e imponer restricciones más amplias y estrictas sobre el producto brasileño.
En la cartera, ya se está discutiendo la posibilidad de enviar una misión al país. La preocupación es proporcional al peso de Arabia Saudita para la industria avícola nacional: es el mayor importador de carne de pollo en Brasil, con envíos anuales que superan los US $ 1.000 millones. Hasta ahora, el caso es una caja negra: los árabes no han informado a las fábricas de BRF sobre los motivos del "mini embargo".
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Solo se sabe que la decisión provino de la Autoridad de Alimentos y Medicamentos de Arabia Saudita (SFDA), la autoridad sanitaria del país. El temor del Ministerio de Agricultura es que Arabia Saudita ponga bajo sospecha a otras empresas brasileñas de envasado de carne. Cabe señalar que la historia reciente de las relaciones comerciales entre los dos países, especialmente en el sector económico en cuestión, es problemática.
En octubre de 2018, una misión saudita visitó Brasil y visitó tres docenas de granjas, mataderos y fábricas de alimentos, lo que demuestra las excelentes condiciones fitosanitarias de todos ellos. Tres meses después, sin más preámbulos, Arabia Saudita suspendió las importaciones de pollo de cinco de los 30 productores calificados para vender al país.
Fuente: BrasilAgro