... que mientras los acontecimientos políticos volvieron a marcar el ritmo, convulsionado, de la sociedad, en el campo fue el clima el encargado principal de marcar el compás de las actividades. Lamentablemente, no por previsibles los daños del Niño están resultando menores, sobre todo porque se dan justo en medio de la cosecha gruesa (ahora suspendida por varios días en las principales zonas afectadas), y porque ya iniciado el otoño, el ritmo de evaporación es más lento, y también se esperan más precipitaciones. Igual hubo una serie de actividades que fueron desde la sorprendente exposición tucumana organizada por la nueva entidad, AproNor, hasta los ecos de la internacional de Holstein en Argentina, o la exposición de caballos en la Rural, pasando por varios encuentros técnicos (como la reunión del Estudio Broda en el CEMA) y privados en los que el tema de la rentabilidad del sector fue eje de todos los debates. También, la situación del principal socio y comprador de la Argentina, Brasil, se suma a la inquietud local, sobre todo en algunos sectores, como el porotero, de gran dependencia del país vecino, y cuyos precios alicaídos- muestran a las claras el problema político-económico que están atravesando.
... que está resultando alto el costo del desconocimiento para algunos funcionarios. Las idas y vueltas, prueba y error, etc., están agotando las posibilidades de algunos sectores, entre los que la lechería o los azucareros son apenas un ejemplo. En ambos casos, con precios internacionales muy bajos (para la leche, apenas unos u$s 2.000 por tonelada, mientras que el azúcar ronda los u$s 200, e internamente, la bolsa de 50 kilos se mantiene hace 3 años entre $ 160-170, a pesar de los aumentos en los costos de producción), hacen que los "tiempos productivos" no se estén adecuado a los "tiempos del aprendizaje" oficial, dando lugar a distintos cortocircuitos, como el que vivió el fin de semana pasado el secretario Ricardo Negri, al fracasar su intento por evitar a los cañeros que irrumpieron en el predio de la fantástica muestra de AproNor no bien se enteraron de que el funcionario finalmente se había hecho presente (aunque por un largo rato no se lo vio). El mal momento, y la falta de anuncios y de respuestas para los productores, no le impidieron a Negri lograr una buena "cosecha" de paquetitos de regalo con que los tucumanos lo agasajaron a pesar de todo.
... que es prácticamente imposible lograr un resultado distinto haciendo las mismas cosas. Ésa parece ser la consigna en el sector lechero donde, a pesar de los muy pocos avances logrados hasta ahora, se insiste con aplicar la misma fórmula de "compensaciones" (que no alcanzan), créditos subsidiados (que pocos están en condiciones de tomar y casi ninguno quiere porque el quebranto continúa), y algunas postergaciones de pagos que, de todos modos, se siguen acumulando y van a operar, en breve, como salvavidas de plomo para una actividad que, para colmo, en los últimos días se vio nuevamente complicada por las lluvias que terminaron de destrozar los caminos para sacar la leche de los tambos. Ahora, después de la jornada de boicot contra las cadenas de hipermercados (#supervacíos) encarada por entidades de consumidores, la producción espera que los funcionarios logren, finalmente, que estos negocios acepten sentarse a la mesa de conversaciones, ya que les atribuyen un fuerte peso a la hora de definir los precios que afectan a toda la cadena.
... que si bien el ánimo general en el campo intenta seguir en la línea del optimismo, las preocupaciones no son menores, tanto por el lado de los altos costos como por algunas contradicciones que se van haciendo evidentes. De hecho, en el norte, a pesar de las medidas ya adoptadas, prácticamente el único cultivo con algún saldo a favor es el maíz. El caso es que la soja tiene aún 30% de retenciones, el poroto tiene los precios deprimidos por la falta de demanda de Brasil, el azúcar por la caída internacional, y algunos citrus también aparecen castigados, mientras que impuestos y costos siguen escalando, lo que incluye los fletes que son determinantes, al punto que el maíz, que con las nuevas condiciones llegó a $ 1.200, tiene $ 600 de transporte a puerto. También desconcierta la suba de retenciones a algunos productos, que va a contramano de la supuesta política oficial que, sin duda, tendría otras herramientas de aliento o disuasión hacia ciertos productos, o para controlar irregularidades impositivas. De hecho, el aumento al 20% de retenciones para algunos productos como ciertos alimentos balanceados y para premezclas de harinas, podría determinar el cierre de algunas plantas norteñas, que no pueden afrontar el nuevo cambio en las reglas de juego. El tema, que involucra tanto al titular de Agroindustria, Ricardo Buryaile, como al ahora mediático Francisco Cabrera, de Producción, seguramente va a dar que hablar en los próximos días por el interés de varios gobernadores (como los de Santiago del Estero y Tucumán, entre otros) en no perder la actividad de algunas de las pocas plantas industriales de la región. El tema se da, simultáneamente, con el "cambio" que provocó la desaparición de la "compensación de exportaciones", esquema que se había impuesto durante la administración K, por la falta de dólares.
