El temblor tuvo una magnitud de 6,9º en la escala Richter y una profundidad de 15 kilómetros. El epicentro se ubicó 381 kilómetros al oeste de la capital mendocina y a 449 kilómetros al oeste de la ciudad de San Juan.
Si bien en un principio las autoridades chilenas alertaron a la población sobre la posibilidad que se genere un tsunami y sonaron las alarmas que ordenan una evacuación preventiva hacia zonas altas, a los pocos minutos el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada trasandina llevó tranquilidad y confirmó que "las características del sismo no reúnen las condiciones necesarias para generar un tsunami en las costas de Chile".
Organismos oficiales del vecino país señalaron también que hasta "el momento, no se reportan daños a personas, alteración a servicios básicos o infraestructura producto de este sismo. Por su parte, los organismos técnicos se encuentran evaluando la situación regional".
En las provincias del oeste y centro argentino el movimiento telúrico provocó alarma, sobre todo en edificios altos, pero tampoco se reportaron heridos ni daños en la infraestructura.
En Mendoza, minutos después de temblor el gobierno provincial emitió un comunicado para solicitar a quienes viajan a Chile extremar las medidas de precaución porque "los sismos que se producen en el vecino país facilitan los desprendimientos de rocas y tierra" en alta montaña.
La región chilena de Valparaíso fue epicentro durante el fin de semana de una seguidilla de temblores. El de mayor intensidad se registró el sábado a las 23.36 (hora local), con una magnitud de 6º. Luego aparecieron casi 100 réplicas.
El Centro Sismológico Nacional (CSN) de Chile se encuentra evaluando si se trata de un fenómeno que técnicamente se denomina "enjambre de sismos". Y si bien los especialistas indican que es imposible prevenir un movimiento telúrico, Mario Pardo, experto del CSN, recordó que en 1985 hubo muchos temblores previos al terremoto de 8,5 grados que afectó a la zona central de Chile y tuvo como epicentro a esta región.
El director del Ministerio del Interior de ese país, Ricardo Toro, indicó que aún se están recabando antecedentes por el sismo. Pero hizo un llamado a la calma a las personas, ya que se descartó la posibilidad de que se produzca un tsunami que afecte a las costas chilenas. "Lo único que se sabe es que ha habido algunas réplicas. Lo importante, por su magnitud y percepción, es que existía la preocupación (entre la población) de que hubiera un tsunami. Pero la gente puede estar tranquila" de que no va a ocurrir, señaló Toro.
Varias personas de la zona afectada reportaron caídas y desprendimientos de rocas desde cerros en la autopista Los Libertadores, la cual recorre las Regiones de Valparaíso y Metropolitana de Santiago, en el Valle Central de Chile, desde Santiago de Chile hasta Los Andes.
Además, se reportó un incendio en un céntrico edificio de Valparaíso que ha movilizado a cuatro compañías de bomberos de la ciudad. Según información preliminar, el fuego se generó en una Fuente de Soda, ubicada en calle Pedro Montt con Av. Francia. Esto implicó que se suspendiera el tránsito por calle Victoria entre Av. Francia y San Ignacio.
En las provincias del centro y oeste argentino el movimiento telúrico provocó alarma, sobre todo en edificios altos, pero tampoco se reportaron heridos ni daños en la infraestructura.
