Tecnología

La importancia del análisis de la semilla para planificar la campaña

En el NEA La pasada campaña, tanto la soja como el algodón tuvieron como factor preocupante el bajo poder germinativo que se vio al momento de la siembra en sus semillas.

11 Nov 2015

Si bien hubo variaciones en la superficie sembrada del girasol en la provincia, que el sector privado estima en unas 150 hectáreas y el Ministerio en unas 240 hectáreas, la zona del sudoeste viene de una buena campaña 2014-2015 en cuestión de materia grasa, algo que se espera repetir. “En la campaña pasada tuvimos en valores generales por encima de la media estatutaria, respecto a lo que es materia grasa, con un 42 por ciento. La mayoría del material que entró tuvieron una materia grasa mayor, con una bonificación del 6 al 8 por ciento”, confirmó el ingeniero Leandro Moreno del Laboratorio El Embirón.

“Este año, con ayuda de la lluvia, la expectativa es que la materia grasa sea de buena a muy buena, algo normal para la zona que suele tener esos valores (del 42 por ciento)”, señalo Moreno.

Pero, en el camino del girasol argentino hacia el mundo, surgió un inconveniente con la Unión Europea, más precisamente con el aceite crudo argentino. “El ingreso de aceite crudo fue prohibido en Europa, tras una disposición modificatoria que se hizo en la legislación sobre los límites máximos de residuos de agroquímicos, más precisamente de un insecticida usado en la pos cosecha, que por lo general utilizan los acopios, que se conoce como diclorvos o DDVP para controlar insectos en al almacenamiento”, comentó el ingeniero Moreno.

“El aceite crudo que la Unión Europea nos compraba a nosotros, y tiene un valor diferencial por su calidad, tras la determinaron que tomó la UE cancelaron la importación. La UE importa casi 1 millón de toneladas de aceite crudo entre Ucrania y Argentina, y ahora quedó el camino libre para Ucrania”, agregó.

“Lo que se está haciendo, desde ASAGIR y el SENASA es trabajar para controlar, o tratar de ir sacando este producto, que es muy común y que la mayoría de acopios utiliza. Es difícil retirarlo porque es un producto que anda muy bien y tiene poca residualidad, pero como es un órgano fosforado es diposoluble, se registra en el aceite, por lo cual aunque una ínfima parte, la UE decidió no importar”, explicó

Para aclarar, Moreno dijo que “esto no se encuentra en el aceite virgen que consumimos, dado que en el proceso de refinación que va desde el aceite crudo al comestible, se va volatilizando, pero el protocolo de la UE siempre ha sido muy estricto en todos los cultivos”.

A la hora de pensar en la alternativa, Moreno contó que podría ser usar otro insecticida como es la fosfina que son gases, que tienen muy poca residualidad y no se registran en los análisis de aceite crudo, “pero una de las desventajas que tiene es que es un gas relativamente tóxico que necesita capacitación idónea para manipularse. La otra es realizar un sistema de trazabilidad desde el productor, o sea desde la siembra hasta la exportación del aceite crudo”, pero aclaró “esto no es un problema que afecte al productor, directamente”.

El análisis para planificar

Una de las situaciones que marco la pasada campaña de la soja fue el bajo PG con el que se encontró el productor al momento de la siembra, en la semilla. “Lo que paso con el poder germinativo en la soja, es algo que venimos notando hace dos campañas, en las cuales cayeron repentinamente el PG en muestras que se hacen de un mes a otro, con diferencias de hasta un 80 por ciento de caída”, aseguró el ingeniero Moreno.

“Esto llevó a que el productor salga a buscar repentinamente semillas de calidades no tan buenas”, señaló lo cual significó costos no planificados y la utilización de materiales de una calidad no tan buena.

“Desde el laboratorio aconsejamos que se realicen dos análisis, uno en junio después de la cosecha, en el cual el productor pueda realizar un manejo más tranquilo o diferenciado (para que la clasifique con tiempo, y si la tiene que almacenar que sea en un lugar adecuado, principalmente que no la deje en contacto directo con el suelo); y el otro análisis antes de la siembra con la semilla que se utilizará- con tiempo- para tomar decisiones oportunas”, detalló.

Otra de las cuestiones que se dieron en la pasada campaña fue la diferencia en lo que es calidad comercial. “Tuvimos una importante diferencia en lo que es granos verdes, muy amplia en la mayoría de las muestras que no se veía en campañas anteriores. Creemos que se debe, principalmente al clima tanto por el exceso o escases de agua, también la infestación por chinche, que repercute en este rubro”, contó Moreno.

“Conocer el material con el que se trabaja, prácticamente te define la campaña teniendo un valor de referencia podes planificar con tiempo, y en caso de que los PG den bajos podes buscar con tiempo semilla buena, o tener un dato que te abale los resultados”, concluyó.

Suscríbase para recibir notificaciones importantes
AGRITOTAL desea enviar noticias de primerísima mano.
Para aceptar basta con hacer click en el botón "Permitir"