"La crisis se está haciendo demasiado larga", señaló el periodista e historiador Carlos Pagni frente a un auditorio colmado de gente en la Sociedad Rural Salteña, en el marco de ArgenCarne NOA, "Estamos en una crisis agravada por la pandemia, algo que sorprendió a todo el mundo y tuvo consecuencias importantes, y en Argentina se sumó a una cuarentena prolongada que agravó problemas existentes. Padecemos ciertas patologías que se han vuelto normales, casi comunes, por la duración de la crisis que lleva más de cinco años".
Pagni repasó la historia de la crisis, señalando que en 2001 se produjo un estallido que cambió el mapa de pobreza en el país, transformándose en un fenómeno sistémico. Hoy vemos un modelo económico agotado para la política, porque se están haciendo las mismas cosas que demanda ese modelo, pero ya no se están ganando las elecciones. Lo pudimos ver en las discusiones que tiene hoy el peronismo sobre el pago de la deuda, la baja de subsidios, el freno a la emisión, etc. Aún en el peronismo dominado por los K hubo una subversión interna porque este modelo no da para más. "Si Cristina tuviera conciencia de alguna viabilidad, el ministro de economía sería Kicillof, no Massa", aseguró Pagni, "Tiene un modelo, pero no tiene un proyecto. Es un modelo hecho para ver, no para hacer".
El periodista continuó: "La dinámica económica llegó a un límite. En eso hay consenso. El diagnóstico está. El problema no es el qué, sino el cómo. La política está metida en este problema y ha producido un gran desgaste en el estado de ánimo. El problema no es la oferta, es la demanda: cómo el electorado mira la escena. Hay una gran nube de pesimismo. Eso produce un estado emocional que tiene que ver con la duración de la crisis. La sociedad que llora es a la que habrá que aumentarle las tarifas, devaluar el salario, etc. Es la que va a pasar por el ajuste".
La oferta tiene un problema porque la primer consecuencia de ese estado de ánimo se ve en las elecciones. En 2021 se reflejó en la gran abstención que hubo en las urnas. "Hay crisis de representatividad", resumió.
Del otro lado, hay miedo a perder el capital político.Ya no hay dos actores en el panorama como antes: kirchnerismo vs. antikirchnerismo. Hay emergentes nuevos: abstención y radicalización del voto: gente que votaba a alguien y hoy vota a los extremos. "La crisis es demasiado larga y ya involucró a todos. Ya votamos a Cristina y no resultó, ya votamos a Macri y no resultó, ya votamos a Alberto y no resultó. La sensación es que pasa con todos", interpretó Pagni, y señaló que el efecto es que produce tensiones en los grupos dominantes: cuando pierden 40% de los votos en dos años, están en problemas. Por eso, el problema lo ponen en Alberto y con alto nivel de agresividad, para apartarse del mismo. Tratan de armar un escenario para evitar una catástrofe electoral. Van a intentar replegarse en la provincia de Buenos Aires, en su estructura económica y territorial. Quieren garantizarse esta provincia.
¿Cómo va a ser la escena del próximo gobierno? No es igual tener al peronismo de opositor si llega al ballotage que si no lo hace. La preocupación de Cristina son las causas judiciales que la están esperando.
El fenómeno Milei
Pagni continuó con su análisis sobre el mapa político en este año electoral haciendo referencia al surgimiento de Javier Milei. "¿Quién es Milei? Tiene los rasgos de un populista, como Cristina. Quiere explicar que eliminando al culpable se termina el problema (la casta). Es el mismo formato, con otros contenidos. Milei expresa la bronca. Además paga en dólares y promete que no te va a ajustar a vos, que va a ajustar a los políticos. Genera una tensión en Juntos por el Cambio y en el Frente de Todos".
Javier Milei tiene intención de voto entre el 28 y el 30%, en una tendencia que se manifiesta constante en las encuestas.."¿Se puede trasladar a la urna sin candidatos atractivos, sin candidatos a intendentes?", se preguntó Pagni y respecto a las PASO, aseguró que Cristina quiere que haya un solo candidato del Frente de Todos, porque quiere generar impacto visual, que en las PASO sea el segundo más votado. Si pone más de uno, en las PASO queda en el cuarto puesto, detrás de Milei, Bullrich y Larreta. "Hay que ver qué pasa en el plano económico. Quizás si el kirchnerismo es derrotado, los activos argentinos se recuperan", aventuró.
Finalmente, el periodista reflexionó: "Las democracias están amenazadas por dos fenómenos: el autoritarismo, donde hay concentración de poder, y la fragmentación, donde no hay una masa de poder suficiente para hacer las reformas necesarias. Veo fragmentación en la política de Chile, Colombia, Ecuador, porque son presidentes que llegaron por ballotage con legisladores que tienen de la primera vuelta. El desafío que nos espera a los argentinos es cómo construir un liderazgo capaz de proyectar un futuro mejor para el país, que nos reenganche con la política, para que Argentina no siga siendo un circo".
