En el último informe elaborado por el Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, se alerta sobre el difícil momento por el que atraviesa los productores de soja de la provincia. Entre las causas se encuentran: la escasez de precipitaciones, los bajos rendimientos obtenidos y las deudas pendientes de pago.
Pablo Fontanini, integrante de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, sostuvo en diálogo con Infobae: "Si se realiza un promedio ponderado a nivel provincial, los productores que arrendaron tuvieron pérdidas en torno a los 600 kilos por hectárea y en campo propio el valor se ubicó en 100 kilos por hectárea".
Fontanini comentó que la última campaña de soja en Entre Ríos "fue la peor en los últimos 18 años, con el rinde promedio provincial cayendo a 1.068 kilos por hectárea, y la campaña que le sigue en pérdidas, fue de 1.093 kilos en las últimas casi dos décadas".
Al momento de analizar la situación de la soja de primera, el informe concluye que en la provincia de Entre Ríos, los productores de la zona Norte y Este que sembraron soja de primera, no lograron cubrir los costos de dicha producción, obteniendo como resultado perdidas.
En la zona Oeste y Sur en campos arrendados los márgenes resultaron negativos. Únicamente en campo propios de la zona Oeste y Sur los márgenes de la soja de primera alcanzaron un margen positivo.
La zona con mayor perdidas en kilogramos por hectárea es la Norte en campo arrendado, la cual se sitúa en torno a los 670 kg/ha, en segundo lugar de importancia se ubicó la zona Oeste con 630 kg/ha.
Solamente los productores que sembraron en campo propio al Sur de la provincia fueron quienes tuvieron las menores pérdidas registradas (alrededor de 20 Kg/ha).
