La siembra de soja 2025/26 comenzó en la región núcleo con una "foto" más alentadora en términos de márgenes y rentabilidad, aunque en un contexto de fuerte volatilidad climática y económica.

En la última década, Brasil lideró el crecimiento de la producción de granos con subas sostenidas en soja, maíz y trigo, mientras que Argentina mostró avances en maíz y trigo, pero una caída estructural en la oleaginosa por falta de inversión y competitividad.

Ensayos muestran que elegir bien la fecha de siembra y el grupo de madurez, cuidar la humedad del suelo, inocular y monitorear la sanidad son prácticas clave para lograr altos rendimientos en soja bajo condiciones de secano.

La Secretaría de Agricultura anunció que la cosecha de soja 2024/2025 alcanzó las 49,9 millones de toneladas, lo que representa un crecimiento del 3,5 % respecto de la campaña anterior y marca el mejor registro de los últimos seis años.

Esta semana, se dio por finalizada la cosecha de soja a nivel nacional, con una producción total de 50,3 millones de toneladas, un 15 % por encima del promedio de las últimas cinco campañas (2018-2023).

El algodón y el maíz tardío enfrentan desafíos por las condiciones climáticas en Santa Fe. Por otro lado, la soja en Entre Ríos dejó una de las mejores campañas de su historia.

La soja vuelve a perder protagonismo en la región núcleo, y los productores le dan cada vez más lugar al trigo y al maíz.

Se ha cosechado el 94 % del área total, lo que representa un avance del 14 % en los últimos 15 días. El rendimiento promedio provincial se ubica en torno a los 2.750 kg/ha, lo que podría posicionar a esta campaña entre las tres mejores de los últimos 25 años.

Según un informe de la BCR, la zona que abarca el norte de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, sur de Santiago del Estero y San Luis cosecharía 15,2 millones de toneladas, unas 5 Mt más que el promedio de los últimos cinco años.

La cosecha de trigo ya comenzó en el sureste provincial con proyecciones históricas de rendimiento, mientras que el garbanzo espera iniciar su recolección en los próximos días con resultados sobresalientes.

Con un escenario inédito de lluvias y rindes que sorprenden, la primera proyección de la campaña 2025/26 iguala la marca histórica de 2021/22. Buenos Aires enfrenta pérdidas por excesos hídricos, pero sigue siendo clave en una cosecha que podría hacer historia.

Un nuevo relevamiento advierte que la baja disponibilidad de micronutrientes, en especial el zinc (Zn), comienza a comprometer los rendimientos agrícolas y la eficiencia de los sistemas extensivos.

En paralelo, el girasol 2025/26 avanza con una intención de siembra que crecería entre un 2 y un 3% en la región núcleo.

Con la siembra finalizada en Buenos Aires y La Pampa, el área triguera nacional se ubica en 6,9 millones de hectáreas, la misma superficie que en la campaña récord 2021/22. Bajo un clima normal y con rindes promedio, podrían lograrse 20 millones de toneladas.

Según el último relevamiento de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la siembra de trigo alcanzó un 95,9 % del área proyectada a nivel nacional, que se mantiene en 6,7 millones de hectáreas (MHa).

En comparación con la campaña pasada, se estima un incremento del 7,5 al 7,6% en superficie, es decir, unas 35.000 hectáreas más que en 2024.

Con 193 mm promedio en agosto y caminos anegados, el panorama parecía adverso. Sin embargo, la tregua climática de octubre y el esfuerzo de los productores permitieron completar 1,4 millones de hectáreas.

El precio de los granos y las lluvias invernales impulsan cambios en la siembra 2025/26: suben los cereales, caen maní, soja y sorgo.

El informe semanal de la BCSF destacó un fuerte avance en la implantación de ambos cultivos en el centro-norte provincial: 95.000 hectáreas proyectadas para maíz temprano y 156.000 para girasol.

Tras la fuerte caída registrada en la campaña 2024/25, el maíz vuelve a ganar área: se proyecta una siembra de 2,9 millones de hectáreas, un 15% más que el ciclo previo y un 28% por encima del promedio histórico provincial.

Según el SIBER, el maíz de primera proyecta 430.000 hectáreas para 2025/26, un incremento interanual del 50%. El girasol mantiene su superficie en 24.350 hectáreas, con los primeros lotes emergidos en buen estado.

La campaña 2024/25 cerró con 49 millones de toneladas, mientras ya avanza la siembra 2025/26 con condiciones climáticas favorables.

Mientras el maíz apunta a una siembra histórica con chances de alcanzar un récord productivo, la soja vuelve a retroceder en superficie. En paralelo, el trigo transita una campaña con condiciones inéditas de crecimiento, aunque con áreas vulnerables por los excesos hídricos.

La campaña 2025/26 en el centro-norte de Santa Fe avanza con perspectivas alentadoras, con un incremento en las áreas de girasol y maíz temprano, y un trigo que se consolida en muy buen estado.

Con una proyección de 5,1 millones de toneladas, el cultivo se encamina a alcanzar su nivel más alto en 26 años, impulsado por buenas condiciones productivas, precios favorables y una industria aceitera en expansión.

La Bolsa de Comercio de Santa Fe informó que concluyó la implantación de girasol en la región, alcanzando las 160.000 hectáreas, lo que representa un incremento del 18 % respecto de la campaña anterior

La superficie proyectada de girasol para la campaña 2025/26 alcanzó las 2,7 millones de hectáreas, lo que representa un incremento de 100 mil hectáreas respecto de la estimación previa.

En paralelo, la siembra de maíz de primera en la campaña 2025/26 alcanzó un progreso del 97 % sobre las 430.000 hectáreas proyectadas.

La plaga se fija a las raíces en forma de pequeños tubérculos, debilitando a la planta hasta provocar pérdidas totales. Se detectó en Bolivia por tal motivo desde el INTA advierten por la facilidad de propagación.

La Bolsa de Comercio de Santa Fe destaca que los cultivos de las campañas fina y gruesa presentan estados buenos, muy buenos y excelentes en la mayor parte de la región.

El último informe del SEA indicó un aumento del 13% en la intención de implantación de girasol y del 20% para maíz temprano, mientras que el trigo mantiene buen desarrollo y sanidad.

El complejo girasol argentino atraviesa su mejor primera mitad de año en más de veinte años, impulsado por una excelente cosecha y un mercado internacional desabastecido.

La incorporación de cuatro secuencias de cultivos logró un incremento del 37 % en el Índice de Calidad del Suelo, en comparación con el monocultivo de soja.

Esta abierta hasta el 12 de diciembre. Es gratuito y habilita para ejercer en las exportaciones de cítricos a la UE y mercados con similares.

Frente al avance de esta plaga en localidades de Chaco, Formosa y Santiago del Estero, especialistas en entomología del INTA destacan la importancia del monitoreo permanente de los lotes. Recomendaciones para mitigar el impacto.

Se trata de "Drosophila suzukii", una especie presente en la Argentina desde 2014 y que constituye una amenaza para las producciones de frutas finas.

La Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Concordia explicó que en las últimas campañas es notable el aumento"de la enfermedad en lotes del noreste de la provincia, provocando daños de importancia en lotes de limón y naranjas principalmente.

Es el primer país en América del Sur y el quinto a nivel mundial en poner en funcionamiento el sistema de liberación de insectos estériles a través del método del adulto frío.

El cultivo se destaca con buenos indicadores productivos y aportes clave al sistema, aunque la rentabilidad depende del rinde y de los costos de semilla.

La superficie se reduciría a 59.000 hectáreas, un 13 % menos que el ciclo pasado. Los altos costos, la baja demanda y la escasa rentabilidad explican la retracción, mientras gana terreno el arroz tipo doble.

Con más de 532.000 hectáreas sembradas y 1,81 millones de toneladas proyectadas, la campaña 2024/25 marca el mayor volumen exportado en más de 12 años, consolidando a Argentina como líder global.

La campaña 2024/25 cerró con más de 1,7 millones de toneladas, un incremento de área sembrada del 15% y rendimientos que superaron los 7.400 kg/ha, según el relevamiento conjunto de entidades del sector.

La campaña 2024/2025 de sorgo concluyó con una producción nacional de 2,9 millones de toneladas, lo que representa un incremento interanual del 16% en comparación con la campaña anterior.

El área sembrada fue de 106.100 hectáreas, con una superficie cosechada de 105.700 ha, un rendimiento promedio de 1.980 kg/ha y una producción total de 209.320 toneladas.

Con rendimientos dispares según la región, el sorgo granífero superó en 100.000 toneladas a la campaña pasada. Al mismo tiempo, el girasol marca un adelanto interanual en la siembra.

De acuerdo al INDEC, durante el primer semestre de 2025 se exportaron 322 mil toneladas de maní y sus derivados por 487 millones de dólares, un crecimiento de 29% en cantidades y de 14% en valores, respecto del mismo período de 2024.