Usted y yo ya sabemos, compañero don Productivo, que la Argentina y Venezuela han ido en los últimos años en la punta de la tabla del campeonato de países del mundo con mayores índices de inflación...
–Bueno, pero tranquilícese, camarada don Tecnológico, que ahora se viene una ley para, por fin, poner en caja a quienes especulan con los precios.
–Como ironía, se lo acepto. Pero esta semana ya apareció otra vez el expediente de frenar o cerrar las exportaciones de carne porque subió la hacienda en Liniers. Cómo sería si realmente estuviésemos en el club de los exportadores. Con un stock de 50 millones de cabezas, estamos por debajo de las 150 mil toneladas anuales. Y nuestros vecinos de Paraguay, con 11-12 millones de cabezas ya nos pasaron el trapo hace rato y están exportando 400 mil toneladas.
–A propósito de leyes: la reforma que mandó el Ejecutivo al Congreso sobre la ley de abastecimiento levantó la oposición de todo el arco empresarial.
–Así es. El miércoles estuvo en Córdoba Rubén Ferrero, presidente de CRA, en el congreso sobre la lucha sanitaria contra la aftosa, justo cuando en Buenos Aires le comunicaban a los frigoríficos que le cerraban el grifo de la exportación.
–¿Y qué dijo el hombre al respecto?
–Con el tono calmo que le conocemos al hombre de la cuenca lechera santafesina, no se anduvo con chiquitas. Juzgó para nada oportuno que el Gobierno mande al Congreso leyes que la sociedad está rechazando, en momentos de conflictos internos, y que tampoco es momento adecuado para mandar una reforma en ley de abastecimiento cuando la Argentina necesita inversiones. Y consideró que “una ley a la venezolana” como esta traerá más incertidumbre. Será mucho peor el remedio que la enfermedad.
–Ya que tocamos el tema: otro integrante de la Mesa de Enlace rural, Carlos Garetto, presidente de Coninagro, fue al plenario de comisiones del Senado y les advirtió a los legisladores que ese proyecto le pone “un cepo” a la producción y por eso “pone en riesgo la mesa de los argentinos”, ya que el precio es el mayor incentivo para quien produce. Según Garetto, la discrecionalidad es hoy la que está afectando la formación de precios en el mercado.