Desde Reconquista, en el norte de Santa Fe, el periodista Ernesto Arzamendia relató que las tareas de evacuación de la hacienda ya es intensa en aquella zona. Pero aclaró que, una vez en tierra firme, no terminan los problemas de los ganaderos sino que empiezan. "Afuera hay lugar para 20% de la hacienda que está en las islas y muchos aprovechan porque bajan los precios. Hay mucha ave rapaz en la inundación", graficó.
Juan Carlos Eiras, presidente de la Cámara Argentina del Feed Lot (los corrales donde se encierran vacunos y se lo engorda con una dieta basada en granos), coincidió en que el gran desafío que traen consigo las cargadas aguas del Paraná es evitar que los productores isleños deban vender rápidamente sus animales, ante la imposibilidad de asegurarles alimento.
"La creciente va a ser grande, con lo cual hay que sacar entre 500 y 600 mil cabezas que están en las islas de modo urgente", evaluó Eiras en declaraciones al canal Agrositio.
Agregó que cerca de la mitad de ese ganado son novillitos que están a mitad de camino para ir a faena. Para el especialista, se trata de "un número importante" que podría impactar negativamente en los precios de ganado si sus dueños, ante la urgencia, apuran la venta. Si, en cambio, logran completar el engorde en campos alquilados o en algún feed lot, el problema de la sobreoferta podría presentarse en primavera.
Una baja pronunciada de los precios de la carne sería dramática en este momento para el sector, que está lentamente recomponiendo sus stocks luego de la crisis ganadera de 2009, que costó unas 10 millones de cabezas. Por los bajos precios, el rodeo nacional cayó de 58 a 48 millones en pocos años. Ahora trepó a 51 millones, pero como los valores están estancados en los últimos dos años, ya se nota una preocupante aceleración de la faena de hembras. La inundación en el delta del Paraná podría acelerar ese proceso.
En este contexto, la Federación Agraria reclamó: "El ministro Norberto Yahuar, en lugar de realizar declaraciones rimbombantes como candidato a diputado, debería ponerse al frente de las angustias de los productores afectados. Se necesita un plan de contención urgente. De lo contrario iremos a la desaparición de más productores y a la caída del stock".
Matías Longoni
