La aplicación de fertilizantes nitrogenados es una condición ineludible para todo sistema de producción de alto nivel. Incluso reviste su importancia la aplicación en estados avanzados del cultivo. Hay resultados que muestran mejoras en el rendimiento luego de aplicaciones tardías.
Dosis variable
Está muy difundida la posibilidad de realizar aplicación variable de N en un cultivo de maíz ya establecido. Esto resulta en beneficios económicos claros, el N aplicado al inicio y que no es utilizado por el cultivo, se pierde en un alto porcentaje por su movilidad dentro del perfil, difícilmente quede disponible en un 100 % para el año siguiente.
Por tanto la aplicación de cantidades adecuadas a las posibilidades de uso se traduce luego en uso más eficiente del recurso y por tanto beneficios económicos a la hora de analizar los números del cultivo.
La aplicación variable de fertilizante requiere tener una prescripción, la cual puede ser realizada a partir de un conocimiento acabado de la realidad del lote por su historia y los diferentes mapas de rendimientos históricos además de otras fuentes de información.
Pero la dinámica del Nitrógeno en el tiempo podría inducir errores en la prescripción. Una aplicación variable mal programada puede inducir aún más variabilidad, además de pérdidas de dinero. Esto no quiere decir que la información histórica no sirva.
Por otro lado como una fuente adicional de información existe la posibilidad de utilizar sensores remotos que miden el estado nutricional del cultivo. Éstos trabajan con la longitud de onda reflejada por el canopeo, la cual es diferente y variable según el balance entre la oferta del ambiente y la demanda del cultivo en lo que se refiere a nitrógeno. Con este dato y un conjunto de algoritmos o cálculos precargados y calibrados en el software se indica la cantidad de fertilizante a aplicar en ese punto.
Estos sensores van montados en el botalón de la pulverizadora por lo que la aplicación es variable en tiempo real; no se utiliza en este caso un mapa de aplicación previamente cargado en la computadora sino una variación de dosis a partir de la lectura de ese mismo momento.
Algunos de estos sensores requieren de un cielo despejado para trabajar adecuadamente, otros en cambio generan su propia radiación por lo que la aplicación es independiente de las condiciones climáticas.
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Montaje de sensores remotos en el botalón y computadora de abordo para monitoreo.
Ventajas
El uso de estos sensores remotos ofrece una ventaja referida a la mayor rapidez del diagnóstico. Por otro lado, permite hacer una aplicación de base a la siembra con una dosis determinada y necesaria para un buen arranque del cultivo y luego una o dos refertilizaciones correctivas y variables que mejoran notablemente la eficiencia del uso de este nutriente.
Los sensores remotos son una herramienta más que aportan una técnica complementaria en el gran universo de la Agricultura de Precisión y no deben ser tomados como una única fuente de información, si lo que se busca es el uso eficiente de un recurso muchas veces de alto valor.
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