Los efectos de la sequía que castiga a Tucumán preocupan a los agricultores de diferentes puntos de la provincia. Representantes de productores de caña de azúcar y de tabaco, manifestaron que respaldarían la emergencia agropecuaria, en caso de que el Gobierno provincial decida declararla, aunque coincidieron en que la medida debería incluir asistencia económica.
El titular de la Unión Cañeros Independientes de Tucumán (UCIT), Sergio Fara, explicó que la falta de lluvias afecta a numerosos productores, en especial de las regiones norte y sur. "Hay muchos que ya perdieron hasta el 50% de su cosecha, antes del inicio de la zafra. Nosotros pedimos que la Estación Experimental Obispo Colombres desarrolle un estudio sobre el estado del suelo y de las plantaciones para evaluar el impacto real del problema", consideró.
En un diagnóstico reciente del meteorólogo tucumano Juan Minetti, se informó que las pérdidas de los rendimientos en la caña de azúcar podría rondar entre el 20% y el 30 % en los próximos años a causa de la sequía. Además, localizó el punto más castigado en el sur de la provincia, aunque también reconoció que hay producciones comprometidas en el este. "Ese sector va a tener que hacer una adaptación a otra forma de agricultura o de ganadería", anticipó el experto. A propósito, Edmundo "Otto" Gramajo, del Centro de Agricultores Cañeros de Tucumán (Cactu), remarcó que, precisamente en el este, hasta el límite con Santiago del Estero, se encuentra el área más crítica. "Esos productores deberán buscar la emergencia agropecuaria", opinó, pero aclaró que esa zona no es apta para el cultivo de caña. "A lo sumo, lo que se consigue es una postergación de impuestos. Para declararla hay que tener el 50% de la producción afectada", subrayó. Fara, por su parte, aseguró que los agricultores damnificados por la seca no cuentan con recursos para responder ante la sequía. "La emergencia sería interesante, pero es necesario que haya ayudas concretas", reforzó. Luis Bravo, de la Asociación de Productores Tabacaleros de La Cocha, remarcó que la falta de lluvias aún no repercutió en el volumen de las cosechas, pero reconoció que hay dificultades para regar las plantaciones. "La represa del dique Los Pizarros no cuenta con la cantidad suficiente de agua. Por eso, los agricultores administran con cuidado este recurso tan escaso por estos días", señaló, y añadió: "la emergencia sería una prolongación de la agonía, si no viene con plata para el productor", dijo, y añadió que en un futuro próximo se necesitarán inversiones para mejorar los sistemas de riego.
