El 14 de abril de 2020, el federado Daniel Ahumada fue víctima de la usurpación de su campo, ubicado en Cruz del Eje, provincia de Córdoba. El usurpador, valiéndose de un arma de fuego, amenazó a Daniel, su madre y su hijo, para quedarse con la propiedad, argumentando haberla comprado. Se trata de un predio cuya posesión corresponde a la familia de Ahumada, que lo adquirió en 1962. Tras un año de espera de la resolución judicial, durante el que contó con el acompañamiento y asesoramiento de Federación Agraria Argentina, esta semana logró que se le restituyera su campo.
A un año de aquel incidente, y atravesando una larga lucha, porque mi campo quedó con una medida judicial de no innovar, debido a la situación de la usurpación y cómo se fueron dando las cosas en ese momento, pasé un año sin poder trabajar. En ese tiempo, la fiscalía trabajó mucho, creo que, por la participación constante de Federación Agraria, que me apoyó muchísimo difundiendo comunicados sobre el tema a nivel provincial, desde los directores de FAA de Córdoba, y a nivel nacional, con la ayuda del presidente Carlos Achetoni y de representantes del comité de acción gremial".
Prosigue Daniel: "Por ese acompañamiento recibido, hoy tengo la buena noticia de que mi campo me fue entregado el lunes 26 de abril, con la presencia de la jueza que me entregó la posesión del mismo. Asimismo, la persona que me usurpó el campo fue imputado por ese delito y por amenazas calificadas. Estoy feliz por esto, ya que todo el proceso fue muy duro para mi familia y para la actividad agropecuaria que desarrollamos para vivir. Ahora veremos cómo continúa la causa de usurpación y la amenaza calificada".
"Frente a algo así, mi mensaje es nunca bajar los brazos. Pedir apoyo a las instituciones, que el productor se comprometa y que participe, porque muchas veces las instituciones no van porque no saben que existimos. Hay que jorobar, comprometer a los directores, usar las instituciones como FAA y muchas otras porque están para esto. A la gente, que no bajen los brazos, lo que es de uno, es de uno. Hay que cuidarlo, apoyándose en las instituciones para vivir en armonía en democracia. Que no se archiven las causas, como le pasa a muchos. Crean en las instituciones, nací gritando y esta vez gané porque nunca me callé. Yo molesté, porque no era justo lo que me pasaba", explicó.