Un punto no menor que destacan en las empresas es que observan que los productores se están volcando cada vez más hacia productos diferenciales. Es decir, con tecnologías de mayor valor pero que resultan ser más seguras, fáciles de manejar y que terminan ofreciendo mejores resultados.
Una prueba de ello es el tratamiento profesional de semillas, que en el caso de soja está en alza y es motivo de diversas alianzas entre las empresas proveedoras de insumos. También es motivo para el lanzamiento de nuevos productos.
"Para la próxima campaña estamos apostando al crecimiento de la adopción de los tratamientos de semilla. En este sentido, presentamos productos innovadores para los dos canales que hoy existen. El canal profesional, semilla tratada en origen y que llega a manos del productor lista para ser sembrada, y el canal tradicional de packs para tratamientos a campo", comentó Pablo Lafuente, gerente de marketing de Biagro, firma productora de inoculantes. En esta empresa dicen que "sin ninguna duda el mercado se inclina por el segmento de productos tecnológicamente diferenciales". Para Lafuente esto significa un desafío para el sector: "Exige a la industria de insumos nuevos y más eficientes soluciones".
En este contexto, en Biagro señalan que el motor de esa tendencia es el productor ávido por invertir en mejor tecnología.
"El productor argentino nunca deja de invertir. Tal vez pueda postergar la decisión de compra de algún elemento para la próxima campaña, pero a la hora de sembrar elige la seguridad que le brindan los productos más avanzados y de marcas líderes", graficó Lafuente.
Siguiendo esta premisa, en esta compañía sostienen que la estrategia está enfocada a posicionar productos que mejoren la productividad.
