En el año 2018, una serie de medidas macroeconómicas fueron una mala noticias para el sector productivo. Ahora, cuando es el momento de comerciar diversas materias primeras son un duro golpe al bolsillo para el productor.
En el programa "Agroindustriales", que se emite por Radio Chacra y conducen Horacio Esteban y Mónica Demichelis, representantes de diferentes economías dejaron ver el mal momento que están pasando.
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"La fruticultura viene con distintos problemas en los últimos años, pero el problema actual son los derechos de exportación, es decir, los 4 pesos por dólar de lo que exportamos. Sumado, también, a la rebaja de los reintegros que sufre el sector. En breve síntesis, esto significa que el productor que vendía el kilo de pera y manzana a razón de 20 a 25 centavos de dólar el kilo, ahora, va a cobrar entre 10 a 13 centavos de dólar", se lamentó Alberto Flores Quiroga, productor de pera y manzana, en la localidad de Villa Regina, en Río Negro.
Según el productor, esto seguirá el viejo derrotero que vienen atravesando las producciones en el Vale de Río Negro, en el cual no se cubrirán los costos productivos y muchas chacras no se mantendrán en la actividad. "Esta decisión de las retenciones es terminal para la actividad", dijo Flores Quiroga.
De acuerdo a datos del productor, esta retenciones son, en términos absolutos y manteniendo los niveles de exportación de 2018, unos 30 millones de dólares de recaudación, afectando a más de mil productores, a unos 25.000 trabajadores y dos días de subsidios a la industria petrolera.
"De esta forma bajarán significativamente los niveles de exportación. Pienso que sin retenciones, igualmente, el Gobierno recaudaría esos 30 millones por el aumento de impuestos, alza en el precio del combustible, la energía", afirmó el productor.
Otra actividad que está pasando un momento adverso es la citricultura. Mariano Caprarulo, vicepresidente de la Federación Nacional del Citrus (Federcitrus) y también presidente de la Cámara Nacional de Exportadores del NEA, contó: "El año 2018 finalizó bien para la citricultura, en líneas generales. Mejor fue para el NOA, aunque las condiciones de competitividad y los accesos a los mercados siguen siendo muy difíciles para esa región. Para el NEA; por su parte, la situación es penosa, no desde hace seis o siete años, como se dice, sino desde hace más tiempo", manifestó el directivo, respecto a esta actividad que exporta el grueso de la producción.
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Señaló que, las retenciones, el tipo de cambio y la rebaja de los reintegros están marcando a la actividad. "Tenemos la intuición de que cuando esto llega no sabemos cuando se va. Están la cadena de valor y la crisis de confianza destruidas", se sinceró.