La situación del puerto se verá sacudida en las próximas horas debido a las internas del Frente Progresista, aunque las novedades no parecen demasiado alentadoras en orden a la reclamada reactivación de la estación.
Se trataría del nombramiento de un nuevo interventor, en reemplazo de Sebastián Fumis, cuya actuación al frente del Ente fue públicamente cuestionada por el gobernador Miguel Lifschitz, en agosto del año pasado. "Nosotros creemos que hay que revisar la acción que está llevando adelante la actual conducción a cargo de Fumis y estamos trabajando en un proyecto alternativo", adelantó por entonces Lifschitz.
Transcurridos varios meses, el mandatario pondría en el lugar de Fumis al contador Sebastián Simez. Lo llamativo de esta decisión es que a Simez no se le conoce demasiada trayectoria pública, ni tampoco antecedentes en la materia. A la vez, está casado con la ex secretaria de la Producción de la Municipalidad, Soledad Álvarez, que en su momento ocupó ese cargo en el marco del "cupo" socialista dentro del gabinete de José Corral.
El contexto temporal en el que Lisfchitz se pronunció sobre Fumis (las Paso del año pasado) y en el que ahora se produciría su reemplazo (marcado enfrentamiento entre Corral y Lifschitz) remiten a la interna de los socios del Frente Progresista. En tanto, la designación de un interventor con tan bajo perfil, alienta fundada preocupación sobre la verdadera importancia que el gobierno provincial le otorga al presente y al futuro del puerto, y habilita a temer que la tan esperada reanimación no forme parte de las prioridades.
