La Comisión Nacional de Valores (CNV) no bajará las tasa de fiscalización y control de $300.000 al año para los operadores de futuros y derivados del agro (llamados "agentes Ruca"), como le pidieron ayer los Centros de Corredores de Granos de Buenos Aires y Rosario bajo advertencia de que semejante suma dejará afuera del negocio a la mayoría de los operadores cerealistas. Los nuevos aranceles (hasta ahora los corredores no pagaba nada por ese concepto) empezarán a regir el año que viene, informó el organismo, que al mantener firme su postura fuerza importantes cambios en la estructura de los agentes del agro que quieran seguir operando en los mercados a término.
En un clima bastante tenso, que contrastó con anteriores encuentros con la cúpula de la CNV, directivos de los Centros de Corredores, acompañados por el presidente del Mercado a Término de Buenos Aires, Marcos Hermansson, se reunieron ayer por la tarde con las autoridades del organismo. Si bien el diálogo nunca se cortó y los corredores reconocieron que hay predisposición oficial a seguir conversando, el saldo del encuentro fue que los corredores de granos no podrán esquivar la transformación en marcha que impulsa la CNV.
"Si bien les explicamos que en la historia centenaria de los mercados a término agrícolas no hay incumplimientos, ellos se mantuvieron firmes en que no quieren correr riesgos y equipararon nuestros aranceles a los que le cobran a quienes hacen operaciones más riesgosas, como derivados financieros, porque -dijeron- que en definitiva nosotros movemos dinero, por más que le explicamos los sistemas de garantías vigentes", le contó a punto biz Carlos Landi, el presidente del Centro de Corredores de Buenos Aires, al término de la reunión.
"La CNV sostiene que no puede haber en el país 377 agentes de liquidación y compensación (Alyc) cuando en los mercados bursátiles desarrollados no hay más de 80. Y si bien creo que apuntaba más a los agentes de Bolsa, los corredores de granos, que tenemos la categoría especial de Alyc Ruca, caímos en la volteada", agregó. "La CNV nos dijo que no quiere que se quede nadie afuera y que se concentre el mercado, y por eso insisten que los cerealistas que no reúnan las condiciones se pasen a la categoría de agente de liquidación (AN), que pagará tasa de $40.000 año y tiene menos exigencias patrimoniales y administrativas", contó.
El problema de convertirse en AN es que el corredor deberá recurrir a un Alyc para compensar y liquidar las operaciones, teniendo así que pagar un costo extra a otro operadores que hoy no tiene porque pueden facturar sus negocios. También está el riesgo de que ese Alyc le quite el cliente, aunque ese temor no lo tiene si opera con un Alyc institucional como la del Matba y la de Rosario Valores. La baja de categoría también supone otro problema es que el AN no puede hacer liquidaciones diarias a comitentes, práctica habitual del corretaje con sus clientes."Precisamente, para superar esos problemas que aparecen por el cambio de categoría, CNV nos propuso que les hagamos una propuesta de cambios operativos que necesitamos ", informó Landi.
El dirigente aseguró que no se tocó en la reunión el tema del próximo aumento de patrimonio exigido para Alyc (es hoy de $1M para los Ruca) y las mayores exigencias administrativas, pero la señal que dejó CNV de que quiere subir la vara de requerimientos para los que quieren seguir siendo Alyc resta margen para esperar que se flexibilicen los nuevos parámetros.
