En un temerario desafío al vértigo, 15.000 personas respondieron a una convocatoria lanzada por el gobierno porteño para ascender los 67,5 metros del Obelisco y disfrutar de su vista panorámica.
Mediante un sorteo, finalmente fueron elegidos 80 postulantes para subir la escalera interior de 206 escalones, con siete descansos cada ocho metros, que conduce a la cúspide del monumento.
La propuesta integra una serie de iniciativas previstas por la Ciudad para celebrar el 80° aniversario del ícono porteño. Primero, se procedió a ejecutar una puesta en valor que incluyó el hidrolavado, la remoción de revoques flojos y la aplicación de 380 litros de pintura exterior. Luego, se inició la renovación del sistema de iluminación. Por último, se convocó a los ciudadanos a subir al mirador.
El ascenso estaba previsto para hoy, pero debido al mal clima fue reprogramado para el 8 de agosto, fecha también sujeta a las condiciones climáticas.
El gobierno porteño difundió la convocatoria en su página de Facebook y, en apenas cuatro días, se produjo un aluvión de postulantes. Fueron seleccionados apenas 80 titulares y 80 suplentes debido a que el ascenso y descenso del Obelisco son muy dificultosos y demandan mucho tiempo.
Por esta razón, se dispuso una serie de turnos para que desde las 8 de la mañana y durante todo el día los 80 ganadores suban en grupos de dos o tres y disfruten de la vista durante unos dos minutos. Aunque los participantes estarán provistos de arneses de seguridad, el SAME y Defensa Civil prestarán asistencia.
Se prevé que la actividad contará con la presencia del jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.
Nueva iluminación
Mientras el costo de la puesta en valor edilicio del Obelisco -que ya está concluida- corrió por cuenta de la Cámara de Empresarios Pintores y de Restauraciones Afines de la República Argentina (Ceprara), una donación de la empresa Phillips permitió renovar la iluminación, en la que aún se trabaja.
El nuevo sistema incluye una tecnología que hará posibles juegos de luces sobre la superficie y variaciones de colores e intensidad.
"Decidimos iluminar el Obelisco de una manera sustentable, con luminarias LED, la misma tecnología con la que venimos reemplazando el alumbrado público de la ciudad. Las luces LED nos permiten reducir más del 50% el consumo de energía", explicó Eduardo Macchiavelli, ministro de Ambiente y Espacio Público de la ciudad.
Según agregaron fuentes oficiales, esta convocatoria a conocer el mirador del Obelisco integra la serie de propuestas que el gobierno porteño desarrolló con el fin de incentivar la participación ciudadana, como las consultas públicas para decidir el traslado del Mercado de Liniers o la colocación de food trucks.
Mientras los trabajos de pintura ya fueron concluidos, el sistema de iluminación se inaugurará el 8 de agosto, el mismo día para el que se prevé -como se dijo- el ascenso.
El Obelisco fue inaugurado el 23 de mayo de 1936 con motivo del cuarto centenario de la fundación de Buenos Aires. Emplazado en la plaza de la República, en la intersección de las avenidas Corrientes y 9 de Julio, fue ejecutado por el arquitecto Alberto Prebisch.
Aunque en un principio estaba recubierto por roca calcárea de San Luis, las vibraciones causadas por el subterráneo provocaron desprendimientos y obligaron a quitar la roca y pintar la cubierta con pintura al látex.
