En el marco de una reunión de capacitación convocada por la Estación Experimental Agropecuaria Pergamino del INTA, se inició el proceso de monitoreo de Dalbulus maidis (conocida como "chicharrita del maíz") en el norte de la provincia de Buenos Aires.
La metodología consiste "en definir lotes donde se realizarán diez estaciones de muestreo, en cada estación se realizan 16 golpes de red, lo que representa unos 8 metros cuadrados de superficie".
Los lotes monitoreados serán aquellos que estén actualmente implantados con cultivos invernales o pasturas, que hayan estados precedidos (o lindantes) de maíz. En estos ambientes, el insecto puede encontrar refugio durante el invierno, ventana de tiempo en la que focalizará este trabajo. El objetivo de esta iniciativa es "investigar la dinámica de la población y contar con información para el momento de definir las fechas de siembra del maíz", indicó el investigador. Federico Peralba, ingeniero agrónomo y responsable del área de Entomología de INTA Pergamino.
Dalbulus maidis es el vector del complejo de enfermedades que afectó al cultivo de maíz durante la campaña finalizada y generó alerta en el sector productivo. La importancia de monitorear la presencia de la chicharrita es fundamental, ya que se trata de un insecto que tiene capacidad de migrar grandes distancias y una vez que infecta al maíz, puede generar grandes pérdidas de rendimiento. Los resultados de los monitoreos serán publicados a través de los distintos canales de comunicación de la Estación Experimental INTA Pergamino.