Las expectativas están puestas en Tartagal Productiva, la primera sociedad del Estado conformada en Tartagal, porque los números comienzan a hablar por sí solos.
La carne de cerdo que sale al mercado local se multiplicó exponencialmente y los volúmenes que antes se vendían solo para las fiestas de Navidad y Año Nuevo hoy se venden en un par de semanas de cualquier mes. La gran demanda tuvo el doble beneficio de hacer rentable un negocio que hasta ahora era, más que un negocio una pelea constante para los productores locales, y que el precio de un corte que hasta hace algún tiempo rondaba los 8 dólares, no supere hoy los 5. Al evitarse el transporte y una serie de factores que encarecen el producto final que paga el ama de casa, los precios de los mejores cortes de cerdo son notoriamente inferiores a cualquier otro producto cárnico.
La semana anterior Edwin Pauls Friesen, el gobernador del departamento paraguayo de Boquerón, visitó Tartagal y se interiorizó en dos temas: el programa de lucha contra el Aedes aegypti (descacharrado, limpieza, detección de reservorios) pero especialmente el funcionamiento de la abastecedora de carnes porcinas, que constituye una de las unidades de negocio de la Sociedad del Estado Tartagal Productiva.
El intendente de Tartagal, Eduardo Leavy, precisó que "Pauls nos anticipó que enviará profesionales de Paraguay para que ellos mismos, que son grandes productores no solo de cerdo, sino también de pollos y de lácteos, puedan replicar el modelo de sociedad del Estado y el fin para la que fue creada en Tartagal".
Una iniciativa para ir creciendo
Al visitar la abastecedora de carnes de cerdos y derivados Pauls fue recibido por el secretario de gobierno Franco Hernández Berni y tres directores de la empresa del Estado, quienes tienen a su cargo el funcionamiento de esa cadena que se inicia con el trabajo de pequeños productores locales; el directorio además administra el matadero municipal, donde se faenan los animales que llegan en pie y, finalmente, tiene a su la venta al público de carnes y derivados. Pero una segunda unidad productiva que ya está en marcha es el envasado al vacío para buscar mercados fuera de Tartagal.
Un 50% más barata
El cerdo es un 50 por ciento más económico que la carne vacuna, los diferentes cortes y derivados se agotan a las pocas horas de colocados en las góndolas porque al precio mucho más accesible se suma la calidad y la variedad de derivados como hamburguesas, milanesas y embutidos. Para completar ese círculo virtuoso que posibilite que la carne de cerdo tenga más consumo, se implementaron cursos gratuitos que se dictan semanalmente en los diferentes barrios y comunidades de Tartagal.
En esas jornadas un chef local, enseña las distintas opciones que tiene la carne de cerdo y, más aún, acompañada con productos propios de la zona como el maíz, la mandioca, el anco, el mango y la palta.
