El Consejo Internacional de Cereales prevé una reducción en los inventarios globales de granos en el período 2017/2018 por primera vez en cinco ciclos, en medio de una menor producción y de un mayor consumo.
En su primer pronóstico para la temporada 2017/2018, el CIC calculó que la producción mundial de granos alcanzará 2.050 millones de toneladas, un declive frente a las 2.106 millones de toneladas calculadas para 2016/2017.
El organismo también anticipa un incremento en el consumo, principalmente en granos para alimentos. Sin embargo, se prevé que los abundantes inventarios globales iniciando el ciclo 2017/2018 aseguren que el total de suministro sea sólo ligeramente inferior al de la temporada previa.
"El panorama preliminar (...) es de un mercado global bien abastecido", dijo el CIC. "Si bien las existencias podrían contraerse por primera vez en cinco temporadas, los inventarios se mantendrán relativamente cargados, con niveles aun mayores que el promedio en los grandes exportadores", agregó.
El grupo calcula que la producción global de maíz en 2017/2018 será de 1.024 millones de toneladas, bajo los 1.053 millones de toneladas previsto para 2016/2017, lo que se debería en parte a una menor producción en Estados Unidos.
El CIC estimó además que la producción mundial de trigo se ubicará en 735 millones de toneladas durante 2017/2018, una baja frente a las 754 millones de toneladas del ciclo 2016/2017.
Se revisó además las estimaciones para las cosechas 2016/2017, elevando la producción total de granos en 4 millones a 2.106 millones de toneladas, el mayor volumen registrado.
La producción global de maíz en 2016/2017 se revisó a 1.053 millones de toneladas desde 1.049 millones de toneladas, mientras que para el trigo se calcula un total en el ciclo de 754 millones de toneladas, revisado desde el pronóstico por 752 millones de toneladas.
El CIC calcula que la producción mundial de soja en 2017/2018 alcanzará un máximo histórico de 345 millones de toneladas. Eso se compara con una producción esperada para 2016/2017 de 341 millones de toneladas, revisada desde un pronóstico anterior por 336 millones de toneladas.
