Tampoco ven al 2017 con mucho optimismo debido a que persisten los problemas que hicieron que este año la carne paraguaya tenga un precio menor en comparación con otros años.
Dijo que la apertura de los nuevos mercados -como Cuba- o la ampliación de otros -como China-Taiwán- tampoco es una garantía para mejorar, al menos sustancialmente, la situación.
Esto, debido a que los mismos no comprarán volúmenes demasiado grandes. Rusia y Chile siguen siendo los principales compradores de carne (ver infografía), y en ambos destinos, hubo mucha fluctuación de los precios de la carne bovina durante el último año.
"Los precios a nivel internacional en general tuvieron una tendencia a la baja, y todo eso hizo que la industria trabaje con más problemas", declaró Pauls.
No obstante, el representante del gremio dijo que existe mucha voluntad para trabajar y tratar de mejorar los números.
Para ello, debe haber un trabajo conjunto con los ganaderos, ya que uno de los principales problemas que enfrentaron este año y que enfrentarán en el 2017, es la disminución del hato ganadero.
Otro desafío para el próximo año, que también debe trabajarse con el sector ganadero, es lograr que haya una mayor trazabilidad, recordó Pauls.
La trazabilidad es un requisito en los mercados más exigentes, que pagan mejor.
En el Sistema de Trazabilidad del Paraguay (Sitrap), figuran apenas 390 ganaderos, que representan el 10% del total del hato existente (1.500.000 animales).
Reportes. Este año, el ritmo en el mercado de exportación se presentó de la siguiente manera: Mayor volumen, pero menores ingresos.
De enero a noviembre de 2015, se exportaron 216 millones de kilos de carne, con un retorno de USD 897 millones. Este año, se envió en ese mismo periodo de tiempo 220 millones de toneladas, por un valor de poco más de USD 863 millones. Todos estos datos son registros del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa).
